Sigo inmerso en este 25º aniversario de boda con el que os he dado la lata. Tranquilos, no insisto más en ello. Pero uno de los regalos que hemos tenido Clara y yo ha sido ir al cine para ver El Prestigio. O, como los cachondos de los distribuidores autóctonos han re-bautizado, El Truco Final. Algún día tendrán que explicarme el oscuro motivo que les impulsa a poner títulos chorras en las películas extranjeras. Y eso que en esta ocasión no ha quedado mal traducido, no. De hecho conserva el espíritu y da fuerza a la idea.
Pero vayamos por partes. Desde que me enteré de la existencia de semejante proyecto, ansiaba por ver este film. ¿Por qué, me diréis, aparte del hecho incontestable de que soy rarito? Pues porque está basado en una de la mejores novelas que he leído en los últimos tiempos.
De hecho Christopher Priest es uno de mis escritores más admirados. El primer libro suyo que leí fue El mundo invertido y ya entonces comprendí que me hallaba ante una eminencia en el campo de la ciencia ficción. Otro Premio No-Nobel, como le sucediera a Stanislaw Lem. Son escritores de enorme talento cuyo pecado capital consiste en escribir esa Cosa que nadie entiende y que la mayoría de intelestuales mira con desprecio y arrugando la nariz, como si les hediera. Ellos se lo pierden...
Pero no es de Cultura, que rima con Tontura, de lo que quiero escribir hoy. Baste señalar que El prestigio, pese a quien pese, es una Gran Novela y a mí me maravilló. Si a ello le añadimos que el director del proyecto, amén de co-guionista con su hermano, es otro gran Christopher, en esta ocasión de apellido Nolan, hacedor de maravillas fílmicas como Memento o Batman Begins, pues la cosa se ponía interesante.
Y ya puestos, añadamos un reparto para quitar el hipo: Hugh Jackman, de quien tenía serias dudas que por fortuna no se han visto confirmadas, Christian Bale, un monstruo actoral sin paliativos, el Graaaaan Michael Caine, quien de nuevo se sale cada vez que aparece en la pantalla, Scarlett Johansson, la única decepción ya que sólo pone el palmito y no da la talla, y un divertido por lo original David Bowie, con bigote victoriano y todo... ¿Quién da más? ¡Si el suyo es un elenco que está de rechupete!
Pues la película ha hecho más que gustarme. ¡Me ha entusiasmado! El duelo entre los dos magos salta chispas y el argumento ha sido hábilmente trasladado al cine, conservando lo primordial. Claro que yo, al haber leído ya el libro, sabía cuál era el truco final. Pero no me ha importado en absoluto y he disfrutado igual, paladeando cada plano con delectación. Incluso sobrecogiéndome con su impactante final.
Nolan, con su marca de fábrica que ya hiciera patente en sus anteriores films, nos traza una historia que no es lineal, saltando hacia atrás y adelante en el tiempo con hábiles playbacks de los suyos, cambiando a cada instante de narrador y de perspectiva. Como un hábil mago nos muestra sus manos en apariencia vacías, prepara el ambiente y nos deja boquiabiertos con su truco final. La historia de esta obsesión que consume a sus dos protagonistas-antagonistas está narrada con habilidad y tensión. Siguiendo la norma que ya propone la novela, nos muestra este sorprendente y aterrador truco en todas sus partes, logrando aumentar el efecto por su aparente simplicidad.
Como todo buen número de magia, el film está dividido en tres partes. Primero tenemos La Promesa, donde se nos muestra algo en apariencia ordinario pero que con toda probabilidad no lo sea. Luego aparece El Giro, cuando eso en apariciencia sencillo realiza algo que es extraordinario. Pero es al final, al llegar la parte del Prestigio, cuando todos embobados vemos algo que jamás habíamos visto antes. Es el Truco Final que nos deja estupefactos, una apoteosis donde todo adquiere finalmente sentido. Una maravilla que nos aturde por completo.
Lo maravilloso del relato, de este enfrentamiento a muerte entre los dos magos, es que Nolan juega con nosotros con gran maestría. Primero nos hace simpatizar con uno, luego con otro, nos hace dudar sobre nuestra elección y luego, de golpe, llega el final revelador y sorprendente, el cual nos coge con la guardia baja. Muy hábil, sin duda el mejor mago ha sido el director.
Sólo puedo añadir que, aunque hayáis leído el libro, vale la pena ver esta película. Su adaptación ha sabido conservar toda la atmósfera y la potencia de sus personajes. Es magistral, tanto en su guión como en su puesta en escena, igual que su dirección y la interpretación de un maravilloso reparto, en el ritmo frenético y elegante que todos le imprimen. Han sabido construir un auténtico y genuino truco de magia que nos atrapará de principio a fin.
Una gozada, vamos.
9 comentarios:
Nosotros hemos estado a punto de verla, pero cuando fuimos no nos cuadró el horario. Entre semana también hemos pensado ir, pero estábamos algo cansados. Así que supongo y espero que este fin de semana sea el definitivo, pues también tenemos muchas ganas de verla desde que tuvimos noticias de ella... ¡Menos mal que no has espoileado mucho, que he estado apuntito de no leerte! Me decía... "un poquito más, un poquito más... parece que no nos la fastidia, un parrafo más" Ufff, de la que te has librao.
Me alegro que las celebraciones te hayan tenido apartado del blog, eso indica que han sido buenas y entretenidas ¡Genial! Dale un beso a Clara de nuestra parte.
Vale, estaba yo disfrutando como una enana de este comentario tuyo de la peli, hasta que he llegado a "David Bowie" y he pegado el frenazo.
Ea, que voy a verla, ya me estabas convenciendo y Michael Caine también, pero el señor Bowie... en fin, qué te voy a explicar a ti, ¿no?
Ya te contaré, ya. Seguro que coincidimos y salgo flipadísima.
Ea, y que sepas que aquí ponen títulos absurdos a las pelis para que no aprendamos JAMÁS inglés y les demos pelillas a las academias de inglés. Aiiiins, cómo se nota que estás enamorado y en pleno 25º aniversario. Que no piensas, Escritor1, que no piensas... XDDDDDDDD
Besilloooos!!
Amigo Orfi:
Ya deberías conocerme un poco, jejeje. A mí nunca me ha gustado "spoilear" y en todas mis reseñas hablo de las obras, ya sean literarias, de cómic o de cine, sin destripar nada (o casi nada) de las historias. Siempre me han parecido pésimos reseñadores los que para criticar algo se limitan a explicarte de qué va. ¡Vaya gracia! A la hoguera con ellos.
Para explicar si un trabajo es bueno o malo, si vale la pena disfrutarlo o no (según el gusto personal de cada uno, claro) no hace falta destripar el argumento. Yo siempre apunto detalles de técnica, estilo y demás. Pero la historia, amigo mío, que te la cuente el artista. Es suya y no mía.
Y dicho todo este rollo, ya tardáis en ir a verla, jejeje.
Ya me contarás qué os parece a Sonia y a ti.
Aporeciada Pily:
¡Lo sabía! En cuanto puse David Bowie me dije: "ésta peli es peli-Pily..." ¡A que no te la pierdes!
De todas formas, advierto que el amigo Bowie sale algo mayorcito y menos dicharachero que en otras cintas. Pero un Bowie siempre es un Bowie, oyes... Yo disfruté con su personaje, al que sabe dotarle de ese pelín enigmático tan suyo.
Y "yes very well fandango" . Cierto en lo que dices, lo de los títulos es una conjura de las academias de ingles, así sin acento. :-D
Ya me contarás tu flipante visión de la Cosa.
¿Besillos? Pues besillos a la mar... :-)
TREMENDÍSIMA, me ha ENCANTAOOOO!!
GRACIAS por la sugerencia. ;-)
Seguro que te quedaste enBowiada viendo la peli...
De nada, a mandar. ;-)
Buena reseña. Ya había oído buenas críticas, así que tomo nota para ir a verla. Tal como está la industria noreteamericana, tener un buen guión (una buena historia) es tener un tesoro. Una apuesta segura.
Y si no tienes nada... vas y escribes "Rocky Balboa" y te quedas tan ancho porque la gente dirá que es un bodrio, pero generará pasta a tutiplén.
Garson
Pues aún no la hemos ido a ver, la del truco no la del Balboa, pero no me resisto a que se nos paso... a ver, a ver... si nos descolgamos este fin de semana, ya te contaré.
Os animo a ambos a verla. Aparte de mi fijación hacia cualquier peli en la que aparezca El Graaan Michael Caine, capaz de salvarla con su sola presencia (sí, sí, incluso en "Shiner", jejeje), pues a aparte de eso "El Truco Final" es un film muy estimable.
Bueno, el guión es primordial. Máxime si tenemos que se basa en una novela de Christopher Priest que Nolan ha sabido adaptar muy bien, quitando toda la paja y poniendo el acento en esa rivalidad enconada entre los dos magos. La ambientación es insuperable y el otro Gran Mito, David Bowie, está fantástico como Tesla, el rival de Edison. Magia, misterio y terror gótico todo concentrado y bien agitado. Insisto: hay que verla.
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